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Discurso de la Diputada Magda Rodríguez, Presidenta de la Comisión Permanente de Equidad de Género, el día 08 de marzo 2010

Honorable Presidente de la Cámara de Diputados, Dr. Julio César Valentín, honorable Ministra de la Mujer Lic. Alejandrina Germán, honorables Diputadas y Diputados, mujeres reconocidas, todas y todos los que hoy nos acompañan.

Hoy, como hace 100 años estamos reunidas para hablar de la igualdad entre mujeres y hombres, para esto he querido abordar tres temas de gran actualidad, cada uno de ellos colaboran en una direccionalidad que contribuirá en el logro de los objetivos de igualdad y equidad social entre mujeres y hombres. El primero es el reconocimiento de las mujeres aquí reunidas hoy.

El lunes de esta semana se celebramos los 100 años desde que oficialmente por iniciativa de la Alemana Clara Zetkin y muchas otras mujeres reunidas en el primer congreso de mujeres socialistas en Copenhague, Dinamarca se instituyó el Día Internacional de la Mujer.

A ellas les debemos esta fecha que hoy es reconocida mundialmente, el hecho de que continuemos rememorando esta fecha es también como símbolo de lo mucho que aún queda por hacer para que las mujeres logren alcanzar la plena igualdad de derechos en la sociedad.

Mi primeras palabras están dirigidas a presentarles en nombre de la Comisión Permanente de Equidad de Género a las mujeres que hoy reconocemos y que son solo una muestra de todas aquellas mujeres que día a día se esfuerzan para hacer del mundo un espacio de mayor justicia para todas y todos, mujeres a las que hoy reconocemos.

Evidentemente con ellas estamos reconociendo que las mujeres somos sujetas heterogéneas por la edad, las ideas, preferencias, etnia, raza, y las cosas que nos apasionan, justamente esta riqueza que es la diversidad es un elemento presente en nuestras mujeres reconocidas en el día de hoy. Es el elemento distintivo, diversas mujeres aportan desde esa diversidad a la construcción de la igualdad.

Históricamente el día de las mujeres ha sido utilizado para visibilizar el aporte de las mujeres en las distintas esferas de la vida, sus roles de madre, esposas, compañeras.

Hoy además queremos destacar la persistencia con que ha trabajado la mujer para lograr la igualdad que aun constituye una aspiración.

Hacemos un tributo a esta persistencia así como a la esperanza que esta es capaz de sembrar en las generaciones a las que les transmitimos una energía transformadora para la igualdad de derechos entre todas y todos.

Estos reconocimientos son un estimulo y a la vez un compromiso por las aéreas de trabajo en la que se desempeñan cada una de ellas.

Este es el primer motivo por el que les hemos convocado y para ellas quiero pedirles un aplauso.

¿Qué hemos logrado las mujeres en el nuevo texto constitucional?

En segundo lugar, porque deseamos compartir con ustedes y el país, cuales son aquellos elementos que el recién proclamado texto constitucional que reconocen derechos a las mujeres dominicanas, para destacar algunas especificidades, todo el texto es nuestra ley de leyes.

Para este propósito hemos preparado una matriz comparativa que hoy ponemos a circular, en que se muestra el texto constitucional vigente hasta el 26 de enero de este año y el que hemos aprobado y que nos rige desde este año 2010.

Con esta publicación deseamos estimular a todas las mujeres a asumir el poder que el reconocimiento de derechos otorga, la constitución escrita y promulgada será efectiva en la medida en que no dejemos de demandar su pleno cumplimiento en todas las esferas.

La igualdad ante la ley de hombres y mujeres, destacada desde la parte pre ambular y en contenido dogmatico del nuevo texto constitucional son la primera ganancia que podemos hablar.

Una igualdad que se ha signado con su doble responsabilidad desde el estado de promover la igualdad y proscribir la discriminación, sin duda alguna es un texto que debemos considerar y tener al alcance de nuestras manos todas las mujeres.

Tenemos ahora en nuestra constitución el reconocimiento de la diversidad familiar existente en la República Dominicana, la equiparación de cónyuges hombres o mujeres como delegatarios de la nacionalidad y haber elevado a rango constitucional el rechazo a la violencia en todas sus formas son elementos muy importantes en nuestra constitución.

La participación como un derecho igualitario tanto directa como delegataria serán a partir de ahora un nuevo instrumento para mejorar la distribución del poder en nuestra democracia.

La valorización del trabajo domestico como actividad que genera riquezas sentara las bases para impulsar reconocimiento económico de este, así como para que sean promovidas políticas de conciliación entre la vida productiva y la reproductiva y para  equipararlas cargas en las responsabilidades familiares.

Es la dignidad el fundamento en que se sustenta la constitución tanto este reconocimiento como la adopción de un Estado Social democrático y de derecho tiene implicaciones para el avance de iguales derechos entre hombres y mujeres en el país, El giro en la doctrina delos principios en nuestra constitución se puede catalogar como piedra angular para la paridad y la libertad de las mujeres. Así como un primer paso en el socavamiento del patriarcado que discrimina y subordina a las mujeres en la sociedad.

Tenemos que revisar las políticas de promoción y la utilización estereotipada de las mujeres en los medios de comunicación, pues nuestro nuevo marco normativo reconoce el derecho a la propia imagen. Claro que estoy avanzando desde una perspectiva de género cuya visión quedó en el texto constitucional deberán interpretarse algunos títulos y artículos de la constitución.

Figuras como el Habeas Data definitivamente serán más socorrida por las mujeres para proteger sus datos que con frecuencia se han visto afectados sin contar con recursos de protección.

Haremos entrega del documento en que estamos destacando la positivación de los derechos humanos que tenemos las mujeres. Solo he colocado algunos elementos para que posteriormente cuando recibamos esta publicación que será la primera en muchas busquemos específicamente cada derecho que podemos demandar en cumplimiento y visión de género para su aplicación.

Estoy plenamente de acuerdo con las palabras del Presidente de la República que ha afirmado que solo para contemplar la igualdad de género valía la pena revisar la constitución .

Finalmente quiero comentar un acontecimiento que aun se está ejecutando que es la evaluación que la comisión para la condición jurídica y social de la mujer realiza de los 15 años de la aprobación de la plataforma de acción de Beijing y la declaración de Beijing. que a propósito de la cuarta conferencia sobre igualdad desarrollo y paz celebró en el año 1995 la ONU.

Es la sesión 54 de la Comisión para la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW), es una comisión funcional del Comité Económico y Social (ECOSOC) de las Naciones Unidas, dedicada exclusivamente a la igualdad de género y empoderamiento de las mujeres. Se celebra anualmente en la sede central de Naciones Unidas en Nueva York y supone un foro de encuentro entre representantes de los Estados miembros, personal de distintas entidades de Naciones

Unidas dedicadas a la igualdad de género (CEDAW, DAW, OSAGI, UNIFEM e INSTRAW) y organizaciones no gubernamentales de mujeres.

En esta sesión que se celebra durante estas dos semanas, la pasada y esta, todos los estados miembros de las Naciones Unidas con sus delegaciones evalúan los progresos, obstáculos, normativas estructuras y desafíos para la aplicación de la plataforma de acción y todos los instrumentos que tienen que ver con el avance de los derechos humanos de las mujeres.

Si bien se registran algunos elementos importantes como los elementos normativos, las estructuras que se han establecido en muchos países, el panorama no es halagüeño, debemos esforzarnos mucho más para que la justicia social sea realidad.

Así lo ha expresado el Secretario General de la ONU Ban Ki Moon Los progresos generales en la aplicación de la Plataforma de Acción de Beijing, han sido muy dispares, con resultados insuficientes incluso en ámbitos como la reducción de la pobreza, el pleno empleo y el trabajo decente, la educación ,en particular la alfabetización, y la salud materna.

Quince años después de la aprobación de la Plataforma de Acción de Beijing, y con los plazos para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio próximos a cumplirse, urge aún más encontrar medios concretos para conformar una perspectiva de género a fin de alcanzar plenamente dichos objetivos y centrarse en mayor medida en la realización práctica del principio de igualdad entre el hombre y la mujer.

Las estadísticas disponibles revelan que los progresos han sido nulos o limitados en muchas esferas. Por ejemplo, la hambruna ha aumentado considerablemente en todas las grandes regiones del mundo y se calcula que más de 1.000 millones de personas sufren malnutrición en la actualidad. Las mujeres están más expuestas que los hombres a la malnutrición porque suelen tener menor acceso a los alimentos, sobre todo cuando escasean.

Aunque las estimaciones sobre el número de niñas que no asisten a la escuela indican que se ha registrado un descenso, la mayoría de niños sin escolarizar siguen siendo niñas y la mayoría de las personas consideradas analfabetas son mujeres. Además, existen disparidades entre la tasa de matrícula y la de asistencia a la escuela, lo cual demuestra la necesidad de ir más allá de las tasas de matrícula y de paridad, que pueden esconder un nivel elevado de exclusión.

El acceso a los mercados laborales y a un trabajo decente sigue estando especialmente restringido para las mujeres, y es elevado el número de trabajadoras que se encuentran en una situación laboral vulnerable. Se calcula que 210 millones de mujeres sufren cada año complicaciones durante el embarazo que ponen en peligro su vida y les producen, muchas veces, discapacidades graves, y que otro medio millón de mujeres muere durante el embarazo o poco después del parto, casi todas ellas en los países en desarrollo. Las investigaciones han revelado que podría evitarse alrededor del 80% de las muertes maternas si las mujeres tuvieran acceso a servicios básicos de atención sanitaria y materna.

Se ha sido enfático al afirmar que si no se presta una atención específica a los aspectos de igualdad entre los géneros en todos los Objetivos de Desarrollo del Milenio, es poco probable que se consigan las metas en su conjunto.

De la igualdad dependen la democracia, la justicia y la paz, en definitiva tenemos grandes desafíos.

No para que nos desanimemos sino para decirles que la lucha es ardua y cada vez necesitamos más manos, y cabezas pensando en la igualdad como un objetivo que debemos alcanzar.

Cuáles desafíos nos deja tanto este nuevo pacto social como los acuerdos de igualdad desarrollo y paz?

Nos lo marcan la revisión que realiza en estas dos semanas de trabajo la Comisión Permanente de Equidad de Género sobre la condicion jurídica y social de la organización de las Naciones Unidas en la evaluación de Beijing, más quince que concluirá el día de mañana en la sede de las Naciones Unidas en nueva york.

La 54 sesión de la comisión de la condiciona económica y social de la mujer órgano de las Naciones Unidas establecida en el año 1946 evalúa las 12 aéreas criticas que en el año 1995 los estados plantearon como los esenciales para impulsar la igualdad el desarrollo y la paz.

En todo el mundo a propósito del 8 de marzo se adopto el tema - Igualdad de Derechos, Igualdad de Oportunidades: progreso para todos.

Muchas gracias.

 

Compromiso de legislar con calidad y decoro

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